Las Frases del Mes: JUNIO.

JUNIO (ing. June, fr. juin, al. Juni, port. junho, gr. Ιούνιος / θεριστής , estremeñu juñu, vasc. ekaina). Sexto mes del año, con 30 días. Del lat. Iūnius, nombre que ya tenía este mes en la antigua Roma y para cuya etimología se han propuesto tres posibles orígenes:
La diosa romana Juno, esposa de Júpiter. Fuente: mitologiayleyendas.blogspot.com
1) Mes consagrado a la diosa Juno (lat. Iūnο), esposa legítima del dios Júpiter, diosa protectora de las mujeres y el matrimonio, y como tal relacionada con la diosa griega Hera. Esta sería en principio la etimología más previsible, si tenemos en cuenta la existencia de otros meses dedicados a divinidades, caso de enero, marzo y –probablemente- mayo (ver entradas correspondientes en este blog).
Alegoría de la Fuente de la Juventud. Panel central de El Jardín de las Delicias de Hieronymus Bosch "El Bosco" (1504). Fuente: es.wikipedia.org
2) Mes dedicado a la juventud y a los jóvenes. En latín, iūnior, iūnius significa “más joven”.  Es ciertamente junio un mes más joven que los cinco que le anteceden, pero más viejo que los seis que le siguen. Etimología sin más apoyo que el parecido fonético.
Lucio Junio Bruto, fundador de la República romana. Fuente: es. wikipedia.org
3) Mes nombrado en memoria y homenaje a Lucio Junio Bruto, considerado tradicionalmente como fundador de la República romana y su primer cónsul. Esta propuesta se basa en la existencia de otros meses cuyo nombre se debe a personajes históricos, caso de julio (de Julio César) y agosto (de Octavio, titulado Augusto), pero carece de mayor fundamento documental.
Hoguera de San Juan frente al Mediterráneo. Fuente: www.denia.com
Es junio un mes de transición entre dos estaciones (como marzo, septiembre y diciembre); conoce las últimas semanas de la primavera y los primeros días del verano. Sus tres primeras semanas, las primaverales, coinciden con el signo zodiacal de Geminī (Géminis, “los gemelos”) y con los días más largos y las noches más cortas del año, tendencia esta que culmina en el solsticio de verano: hacia esa mágica NOCHE DE SAN JUAN que da paso a la estación estival bajo el signo de Cancer (Cáncer, “el cangrejo”). La Noche de San Juan es la víspera de la festividad de San Juan Bautista, que en el mundo cristiano se conmemora el 24 de junio; en la tradición occidental se sitúan en ella los rituales –en su mayoría de origen pagano- que celebran la noche más corta del año con la exaltación del agua y del fuego mediante hogueras purificadoras y baños propiciatorios hasta la pronta llegada de un amanecer en que el sol se levanta con una luminosidad que no tiene en ninguna otra época del año. La vinculación de este mes de junio con la celebración sanjuaniega es tal que en algunas zonas se alude a él como San Juan, así por ejemplo en Galicia: donde es denominado comúnmente como San Xoán.
Celebración de la Noche de San Juan en la playa coruñesa de Riazor. Fuente: www.laopinioncoruna.es
Es precisamente junio uno de los meses más pródigos en festejos populares, porque al mencionado San Juan del 24 acompañan San Antonio el 13 y San Pedro / San Pablo el 29, santos todos ellos de muy extendido culto por las tierras ibéricas.

En lo meteorológico, junio es por nuestros pagos el primer mes realmente caluroso, y es lo suyo: Junio brillante, año abundante, por más que alguna vez pueda presentarse algo fresco, especialmente en sus primeros días y en concreto antes del noveno, ese proverbial 40 de mayo (pero a veces incluso después): Hasta el cuarenta de mayo no te quites el sayo, y si junio es ruin, hasta el fin. Aunque el calor creciente va secando los veneros de los campos y derritiendo los neveros de las montañas, ocasionalmente pueden presentarse tormentas muy peligrosas para los cultivos: Tormenta de junio golpea como un puño. // Por San Antonio, el granizo amenaza el patrimonio. // Aguas por San Juan no dan vino y quitan pan. Fuera de las imprevisibles tormentas, suele ser por aquí un mes poco o nada lluvioso: Si mayo bien llovió, seco a junio sacó. De ahí que sea el mes de segar los prados y empezar a cosechar algunos cereales: El heno, corto o largo, por junio ha de estar segado. // Cuando junio llega, afila la hoz y limpia la era. Es también tiempo de la maduración de muchas frutas de hueso, y así melocotones, albaricoques o cerezas vienen a poner una nota de alegría y color en nuestras cocinas.
La cerecera, recolección manual de la cereza en el Valle del Jerte, alcanza su punto culminante en este mes de junio. Fuente: www.picotasjerte.es
La luz de los días de junio tiene un brillo, una claridad y una nitidez sin parangón en ninguna otra época del año: Cielo de junio, limpio como ninguno, sobre todo al amanecer y al anochecer, y de manera muy especial en los días más próximos al del solsticio de verano, ese día más largo del año: En junio, el veintiuno, es largo como ninguno, y durante esos días interminables que van de San Juan a San Pedro, en los que el sol parece detenerse en el cielo.
Celebración del solsticio de verano en el recinto megalítico de Stonehenge (Britannia). Fuente: notihoy.com
Termino de escribir estas líneas cuando acabamos de entrar oficialmente en el solsticio de verano, a las 00:34 horas del 21 de junio de 2016, coincidiendo con un plenilunio en la noche más luminosa de lo que llevamos de año.

Comentarios